La Mujer Rota es una obra conformada por tres historias, de las cuales la tercera lleva ese título. Las otras se denominan La Edad de la Discreción y  Monólogo.

La protagonista de las tres historias, escritas por Simone de Beauvoir, es una mujer que enfrenta situaciones complejas, en contextos patriarcales que la reduce y la encarcela.

La autora denuncia la condición inferior de la mujer de una forma eficaz y mordaz, fatizando en el mundo interior de sus protagonistas y mediante el uso del llamado flujo de conciencia.

Las partes de un todo

La Edad de la Discreción se trata de una mujer intelectual de unos 50 años, quien ve alejarse a su hijo, pues este va olvidando paulatinamente los compromisos con su madre. La protagonista enfrenta esa etapa de la vida con desaliento y confusión, sin asidero firme en los logros del pasado y al lado de un esposo que se muestra casi indiferente a su situación emocional.

De los tres relatos, Monólogo, pudiera ser el más impactante. Cuenta la historia de una mujer de 43 años, desequilibrada psicológicamente y llena de rabia y desesperación, cuya infancia estuvo marcada por la violencia.

La protagonista habla de su hermano homosexual y de su condición de mujer, utiliza un lenguaje grotesco para relatar sus experiencias sexuales con desconocidos. A medida que vamos conociendo sus experiencias entendemos su lenguaje y el furor desmedido de esta mujer que parece y reniega de la vida misma.

Sin embargo, La Mujer Rota, es considerada la más penetrante. Se trata del diario de una mujer, donde relata la infidelidad de su esposo.  El lector asiste a la narración del proceso psicológico de esta mujer que reacciona de la única forma de la cual es capaz: racionalizando sus sentimientos, en espera de que su esposo recapacite y vuelva al hogar. En el proceso, ella se va degradando paulatinamente.

El todo

Aunque fue escrita en 1968, La Mujer Rota, en su conjunto, es una obra que hace reflexionar sobre los eternos problemas femeninos, sobre las desigualdades del pasado y las más sutiles desigualdades del presente.

En palabras de Simone de Beauvoir:

“El día que una mujer pueda no amar con su debilidad sino con su fuerza, no escapar de sí misma sino encontrarse, no humillarse sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida y no un peligro mortal”.