Poeta, narrador y dramaturgo finés. Autor de una fecunda y brillante producción literaria que abarca casi todos los géneros que estuvieron en boga en su tiempo. Gracias a su famosa novela Sinuhé el egipcio, se convirtió en uno de los escritores fineses de mayor proyección universal.
Vida y Obra
Mika Toimi Waltari, nació el 19 de septiembre de 1908 en Helsinki. El segundo de tres hijos. Sus padres, Toimi Waltari y Olga Johansson, se había conocido mientras Toimi enseñaba religión en la región de Porvoo, pues era pastor luterano y Olga era una de sus alumnas. El escandalo causado por su relación los obligó a mudarse a Tampere y los dos se casaron el 18 de noviembre de 1906. A la edad de cinco años, Mika perdió repentinamente a su padre debido a una enfermedad. Su tío Toivo se hizo cargo de la familia.
Posteriormente matriculó en la Universidad de Helsinki como estudiante de teología, según los deseos de su tío, pero pronto abondonó la teología en favor de los estudios humanísticos y el ejercicio de la creación literaria. Mientras estudiaba, colaboró en diversas revistas y escribió poesías y relatos. Su primer libro Jumalaa paossa, publicado en 1925, fue un éxito, vendiendo 3000 copias a pesar de tener solo 72 páginas.
En 1927 marcha a París donde escribió su primera gran novela La gran ilusión (Suuri Illusioni), un elegante texto sobre la juventud urbana de los “años del jazz”, que recoge con sensibilidad el clima de entusiasmo y vitalidad de esa generación. La novela se considera, en términos de estilo, el equivalente finés a las obras de los escritores estadounidenses de la Generación Perdida. La gran ilusión, fue un éxito sorpresa, vendiendo 8000 copias y convirtiendo a Mika Waltari en un autor famoso.
También en la novela con forma de crónica de viaje El tren del hombre solitario, de 1929, Waltari interpreta agudamente el clima europeo en el momento en que el sentimiento de libertad y de desenfrenada alegría de vivir de los años veinte está a punto de retroceder ante la austeridad del emergente nacionalismo de varios países europeos.
En esta etapa fue un de los principales animadores del panorama literario de Helsinki, en el que participó activamente dentro del célebre grupo literario de los Tulekantajat (Portadores de fuego), formado por jóvenes creadores que consiguieron introducir el espíritu y la estética modernista en las letras finesas. Más tarde, sus opiniones políticas y sociales se volverían conservadoras.
Waltari desarrolló un estilo narrativo nuevo, de acuerdo con los ideales de renovación de este grupo literario. Su prosa, clara y ágil, se basa en el lenguaje estándar culto y urbano, carente de expresiones dialectales. El “esprit” que caracteriza su estilo se debe a su actitud discretamente irónica pero humanamente comprensiva.
Se graduó en la universidad de la capital finesa, con solo veinte años de edad. Ese mismo año publica un volumen de versos titulado La calle mayor, en la que sobresale la preocupación del joven poeta por los aspectos mecánicos de la moderna civilización y por la importancia que ha adquirido la vida urbana.
Contrajo matrimonio el 8 de marzo de 1931 con Marjatta Luukkonen, a quien había conocido durante el servicio militar el año anterior, y el 4 de enero de 1932 tuvieron una hija, Satu, que también escribe. Durante las décadas de 1930 y 1940, Waltari trabajó como periodista y crítico, escribiendo para varios periódicos y revistas y viajando ampliamente por Europa. En su país dirige la prestigiosa revista Suomen Kuvalehti (1936-38).
Esta preeminencia en el epicentro intelectual y artístico de su pueblo le condujo también a desempeñar importantes cargos públicos al servicio de sus conciudadanos, sobre todo durante la Guerra Ruso-Finesa y la II Guerra Mundial, en las que desarrolló una importante labor logística como miembro de la oficina de información del estado. Según el historiador finés Eino Jutikkala, a través de esta experiencia como propagandista, Waltari se volvió más cínico al darse cuenta de la prevalencia de medias verdades históricas moldeadas por la propaganda, que más tarde fue un tema recurrente en sus novelas históricas.
Su mayor éxito a escala mundial lo obtuvo con su novela histórica Sinuhé, el egipcio (1945). La obra, una especie de memorias de un médico, situada en el siglo XIII antes de Cristo, fue durante mes y medio número uno en la lista de ventas de Estados Unidos, y, posteriormente, fue llevada al cine. Utilizando todos los recursos de la psicología moderna, Waltari dio a su héroe una consciencia contemporánea en medio de un ambiente lleno de contrastes violentos y rodeado de una atmósfera de horror.
Refiriédose a su obra más completa, Waltari en su última entrevista dijo: “Iba a escribirla cuando estalló la guerra, por lo que me vi obligado a acabarla cinco años más tarde. Fue una suerte para mí, pues sin las experiencias vividas en la guerra no habría podido escribir la novela”.
A Sinuhé, el egipcio, le siguieron Vida del aventurero Mikael Karvajalka (1948), El ángel negro (1951), El sitio de Constantinopla (1952), El etrusco (1955), El secreto del reino (1959), Marco, el romano (1961), Lauso el cristiano (1967) y Juan el peregrino (Nuori Johannes, 1981), libro póstumo.
Todas estas novelas son ricas en particularidades históricas cuidadosamente documentadas, y están ambientadas en su mayor parte en el mundo mediterráneo. La fascinación que ejercen es debida, más que a la vivacidad y tensión de la narración o a la fiel reconstrucción del contexto histórico, al profundo sentimiento de humanidad, acompañado de la ligera ironía que caracteriza los textos de Waltari.
En estos libros el contexto histórico sirve de marco a una cautivadora experiencia humana y personal, y los protagonistas, representantes de varias épocas históricas, son portavoces de la filosofía pesimista y desilusionada del autor. Las dos últimas novelas se basan en el problema de la fe cristiana, que el escritor trata con el mismo agnóstico respeto que a las otras manifestaciones espirituales de la historia de la humanidad.
Se convirtió en miembro de la Academia de Finlandia en 1957 y recibió un doctorado honorario en la Universidad de Turku en 1970. Como miembro de la Academia de Ciencias y Letras, guió a escritores más jóvenes. También participó en la reedición y edición de sus primeros trabajos y concedió largas entrevistas a la autora Ritva Haavikko que se publicaron como libro.
Waltari fue uno de los escritores finlandeses más prolíficos. Escribió al menos 29 novelas, 15 novelas, 6 colecciones de cuentos o cuentos de hadas, 6 colecciones de poesía y 26 obras de teatro, además de obras de radio, traducciones y cientos de reseñas y artículos.
Poco antes de su muerte apareció Humildad y Pasión (1978), memorias íntimas en las que revela todas sus obsesiones. También es el escritor finlandés más conocido a nivel internacional, y sus obras han sido traducidas a más de 30 idiomas.
Falleció el 26 de Agosto de 1979 en su país natal.